Era una calurosa tarde de verano y yo me iba a encontrar con mi deseada Maeba tras un tiempo sin verla. Ella me había prometido que pasaríamos la tarde juntos y que vería la belleza de su cuerpo en todo su esplendor. Lo que no me imaginaba, es lo que me encontraría a continuación.
Llegué a una cafetería en el centro donde ella me esperaba con un amigo suyo. ¿Amigo suyo? Sí, vaya no venía sola. Nos presentamos, “yo soy F” dije yo y él me respondió, “yo P”. Pude observar que tenía un cuerpo bastante trabajado en el gimnasio y una carilla de guaperas lo cual me resultó un poco extraño ya que había quedado con ella sola, pero mis ganas de verla y estar con ella no disminuyeron lo más mínimo. Nos sentamos y estuvimos merendando cómodamente y riéndonos alegremente con las anécdotas que nos íbamos contando.
Una vez terminado el café, Maeba tuvo una sorprendente ocurrencia. ¡Nos iríamos a un hotel! Al oír la noticia mi corazón dio un vuelco. A P no le afectó tanto así supongo que estaría ya preparado. Nos adentramos en un hotelito el cual encontramos muy bien de precio y tenía su propio baño en la habitación. Nada más entrar, Maeba me dejó sorprendido. Nos pidió ponernos P y yo uno al lado del otro y delante nuestra y sin avisar empezó ha desnudarse y a seducirnos con sus traviesos roces sobre zonas en las que cualquier hombre lograría una gran erección. Se quedó solo con una hermosa ropa interior negra medio transparente por la parte del culo y con bordados en el sujetador. Cuando volvió la vista hacia nosotros ella no pudo contener la risa. Los dos estábamos perplejos apreciando tan divino cuerpecito que bien conocíamos por sus fotos porno y su magnífica web. En persona ganaba el doble. Si no hubiera sido porque debíamos mantenernos uno al lado del otro hubiera saltado corriendo a besarle todo su cuerpo a tan bella mujer.
Maeba también estuvo al tanto de un aspecto que a P y a mí se nos escapaba. Tras el stiptease ambos teníamos la polla erecta y de qué modo. Maeba dijo: “jugaremos a un juego”. “La cosa se pone interesante”- pensé. “Quién la tenga más grande y gordita”- Maeba añadió- “será el afortunado que me folle esta tarde”. “El que pierda hará el papel de mi cornudo sumiso y deberá hacer verme follar y ayudarme en todo lo que yo le pida”. Tras decir esto yo podía bien vaticinar cual sería mi papel en aquella tarde pero bueno nunca se sabe y ambos papeles me atraían si bien he de decir que la idea de follarse a Maeba resultaba bastante tentadora. Maeba cariñosamente agarró una regla y con suavidad nos fue bajando los pantalones y la ropa interior. Déjenme que les diga que no hizo falta la regla. Menuda polla gastaba P. Parecía un cañón apuntando a mi linda Maeba. No había visto nada parecido salvo en alguna película porno o web. Sin más mediaciones Maeba eligió al ganador. Os confieso que la situación en vez de entristecerme consiguió ponerme más excitado aun ante la idea de servir a esta chica tan hermosa que todos por aquí conocéis.
Maeba me pidió que me echase a un lado y me sentase en el suelo mientras ellos de pie se besaban y sobaban mutuamente. Entre cálidos besos y caricias Maeba se aseguraba que aquel miembro de enormes dimensiones se mantuviese bien firme y listo para cumplir su misión. No pasó mucho tiempo hasta que Maeba se agachó a saborearlo. Empezó que lentos lamentones que fueron incrementándose hasta abrir por completo la boca e introducir toda la polla en ella. Era impresionante como Maeba tenia toda la boca llena y como disfrutaba. De vez en cuando me obsequiaba con algún besito introduciéndome su lengua bien adentro para que según ella, pudiera disfrutar del sabor de una polla de verdad. Para mí no era la polla lo que me interesaba sino besar a mi diosa y compartir sus labios. Si además la hacía feliz pues mejor. A P también parecía que le gustaba la idea de que yo fuera el cornudo del momento ya que cada vez que Maeba me besaba el parecía excitarse aun más.
Pronto la arrojó sobre la cama y dispuso su herramienta directamente a penetrarla. Para nuestra sorpresa Maeba le interrumpió la jugada añadiendo que antes debería yo preparar su chochito para que estuviera listo para su hombre. Me pidió que me acercará y comenzase a la lamérselo con tanto esmero que debería estar bien mojado y lubricado para que su hombre pueda disfrutar al máximo y pudiera embestirla en condiciones. No me lo podía creer. Ante mí tenia mi tan ansiado sexo de Maeba el que tantos días había soñado con comérmerlo. Ahí estaba, ya no había vuelta atrás, precioso como siempre y oliendo como el mejor perfume del mundo. Os aseguro que todos querríais haber estado en mi lugar aunque de cornudo en tan excitante situación. Lentamente fui acariciando con mi lengua los muslos de Maeba en mi camino por alcanzar su sexo. Nada más llegar pude notar un pequeño estremecimiento en el cuerpo de Maeba. Primero pasé mi lengua con suavidad para notar sus flujos mezclándose lentamente con mi lengua y finalmente posando mi boca entera para degustarlos. Para mí, ese era el más rico néctar y aprovechar el momento. Así estuve un largo rato que para mí fue corto. Maeba parecía estar disfrutándolo y yo muy conforme de estar sirviéndola bien. Sin embargo P no podía aguantar más y agarrándome me echó para atrás y… Maeba soltó un grito de placer. P la había embestido sin previo avisó y todo de una vez. Maeba me miró a los ojos y me dijo: “Lo has hecho fenomenal cornudito. Ha entrado perfectamente”. Yo me volví a sentar en el suelo y contemplar como te embestían.
Tú gemías fuertemente haciendo evidente todo el placer que sentías. De repente me dijiste que me tumbara en la cama y que no estuviera en el suelo. Al parecer querías darme un plano mejor. Te pusiste encima mía como si fuésemos a hacer un 69 pero no esa no era tu idea. Simplemente te pusiste así para que pudiera apreciar de cerca como esa polla descomunal entraba y salía de tu chochito. P te la introdujo y empezó a embestirte. La situación era excitante e incómoda a la vez ya que los huevos de P no dejaban de chocar contra mi cara en cara embestida. Al menos podía deleitarme con tan linda vista de tu sexo.
De vez en cuando P paraba y la sacaba para que yo pudiera degustar los ricos jugos de tu sexo ahora chorreante con la excitación del momento. Finalmente en una última tanda de embestidas P empezó también a gemir con fuerzas haciendo evidente lo que vendría a continuación. Entre gemido y gemido empezó a disminuir el ritmo de las embestidas y a hacerlas cada vez más profundas hasta que paró. Estuvimos todos un rato inmóviles hasta que finalmente sacó su pollón y una gran carga de esperma asomó por tu chochito aterrizando parte en mi cara asqueada. Me dijiste que no pusiera esa cara y bajaste tu chochito hasta mi boca para que lo dejase limpio del semen de tu hombre. Yo accedí pues tenía inmensas ganas de satisfacerte. Luego te acercaste a mi me besaste y me limpiaste el semen que había caído sobre mi cara con tu lengua. Finalmente, y como recompensa, me realizaste una satisfactoria mamada en agradecimiento con la pega de que con picardía no me dejaste terminar y justo antes de querer eyacular sacaste tu boca de mi polla y te fuiste con P al baño mientras yo esperaba en el cuarto con el calentón y pero felizmente de haber podido degustar tu cuerpo en casi todos los sentidos.
FIN
Algo así me pasó a mi una vez. Estabamos otro chico y yo para hacer un trío con una conocidad y antes de empezar nos dijo que al que la tuviera más grande de los dos, se lo follaría otra vez en solitario. Esta vez tampoco hizo falta usar la regla, me sacaba como 5 cm, pero al menos pude disfrutar y mucho del polvo que la echamos.
Jajaja, osea que no es sólo la fantasía de F…, también la chica qué jodía; yo hubiera elegido la que mejor me follase, que muchas veces el tamaño no está ligado a la calidad. Muacks
Pues en este caso además de tener un tamaño bastante mayor, parece que el otro chico en cuanto a calidad estaba un poquito por encima también(confirmado por ella), que se le va a hacer. Pero estuvo bien, lo pasamos bien los tres, sobre todo ella.
Entonces, ya no había opciones, en fin…disfrutar es lo importante 😉
Buen relato,solo con dejar correr la imaginaciòn e imaginarte metida en faena me excito…a ellos los veo borrosos pero a ti te veo con toda claridad,jejeje
Lo que pasa que yo no me puedo imaginar en esa situaciòn haciendo de cornudo sumiso…seria demasiado frustrante. Tenerte delante,yo con la polla dura y tener que frenarme y no hacerte todo lo que me apetecerìa…emmm me darìa un infarto,no podrìa controlar mi deseo
Jijijiji, es que me temo que tú no eres como F 😉 Tu eres de actuar pero que bien 🙂 Feliz año!!
Por cierto..feliz año nuevo!!