A la pobre Apolonia su coche le ha dejado tirada en medio de ninguna parte, sin cobertura y con unos tacones muy altos. Cuando la desesperación comenzaba a apoderarse de ella, apareció muy oportunamente Sasha Blonnde a lomos de su
A la pobre Apolonia su coche le ha dejado tirada en medio de ninguna parte, sin cobertura y con unos tacones muy altos. Cuando la desesperación comenzaba a apoderarse de ella, apareció muy oportunamente Sasha Blonnde a lomos de su